Primer LBC en Europa
El edificio Cal Guerxo es un proyecto destacado de rehabilitación y recuperación de espacios abandonados que ha logrado convertirse en un referente al obtener la certificación Living Building Challenge LBC, siendo el primero en Europa en lograrlo, junto con una certificación LEED Platino. Su diseño y concepción se basan en criterios de arquitectura regenerativa, desarrollado de manera totalmente colaborativa, el proyecto ha sido liderado por su promotor y experto en sostenibilidad Emmanuel Pauwels y con la participación activa de un amplio equipo de agentes colaboradores.
Destacamos seis aspectos clave de este proyecto:
- Respeto a la arquitectura vernácula y planificación para futuras crisis, asegurando que no haya impacto ambiental negativo. El proyecto integra la biophilia y la permacultura como principios fundamentales.
- Se ha restaurado la tierra de manera intencionada para crear espacios que conecten con la naturaleza, permitiendo cultivar jardines, cosechar alimentos, disfrutar de rituales de sauna, sumergirse en una piscina orgánica y estimular la biodiversidad.
- Se ha dado prioridad a las formas redondeadas y se han utilizado materiales como madera, arcilla, paja y arena para crear texturas cálidas. Estas formas y materiales orgánicos generan una atmósfera de paz y una energía positiva y vital.
- Se utiliza el diseño pasivo solar para la calefacción, mientras que la captación activa a través de la cubierta fotovoltaica genera un excedente de energía del 112%.
- El agua de lluvia es la única fuente de agua utilizada en el proyecto. Se ha cerrado el ciclo hidrológico de Cal Guerxo, consumiendo solo 44 litros por persona al día. Toda el agua residual se filtra a través de un humedal construido y se devuelve a la tierra, regando árboles frutales y vegetales en su camino.
- La huella de carbono total de la renovación se redujo a 2,000 kg CO2 al reutilizar la mayor cantidad posible de materiales en el lugar.
Cal Guerxo destaca como un proyecto de referencia en la rehabilitación y recuperación de espacios abandonados, siendo el primero en Europa en obtener la certificación Living Building Challenge LBC. Su diseño regenerativo, generación de energía sostenible, enfoque en la naturaleza, bioconstrucción y colaboración activa de diversos agentes, lo convierten en un hito en la arquitectura sostenible y saludable